El Economista | Por: Lilia González.
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) entregó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador una propuesta de medidas económicas, fiscales y administrativas, que incluyen incentivos fiscales como la depreciación acelerada a la inversión, reducción del Impuesto sobre la Renta (ISR), así como el Impuesto sobre la Nómina para preservar el empleo, mantener las empresas y enfrentar la pandemia del Covid-19.
Mientras que en el mundo se han implementado medidas para estimular la economía y atenuar los efectos de esta crisis, Carlos Salazar, presidente del CCE, lamentó que en México se carezca de un plan para hacer frente a la emergencia de la pandemia.
La medida primordial que plantea el CCE es que se usen los recursos del superávit primario planeado, que ascienden a 13,000 millones de dólares.
José Luis de la Cruz, director de asuntos económicos de la Confederación de Cámaras Industriales de la República Mexicana (Concamin), sostuvo que se requiere con urgencia una tregua fiscal para que la planta productiva pueda avanzar.
Francisco Cervantes, presidente de la Concamin, urgió que se garantice la liquidez de la economía y se prolongue la reducción de las tasas de interés. Continuar leyendo […]