Milenio | Esther Herrera.
Ante la presencia del coronavirus en México, el país debe prepararse para enfrentar los efectos económicos y financieros del problema de salud pública generado por esta enfermedad.
José Luis de la Cruz, director del IDIC (Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico), señaló que hasta este momento se pueden cuantificar 4 efectos inmediatos: la caída bursátil, la depreciación del peso, la contracción del precio del petróleo y la pérdida de valor del oro. Todo ello atribuible a la incertidumbre, volatilidad y salida de capitales que ha ocurrido en todo el mundo pero que se exacerba en las economías emergentes.
Adicional a lo anterior, falta un efecto que ya se está incubando en el sistema económico, pero del que las cifras tardarán en ser públicas: el debilitamiento de la industria manufacturera y del comercio internacional asociado. Un menor crecimiento económico global puede provocar que la tendencia industrial negativa observada durante un año se exacerbe y generalice. Continuar leyendo […]