Forbes | María Fernanda Navarro.
Los efectos de la expansión del coronavirus COVID-19 en varias partes del mundo aún son una incógnita para las autoridades sanitarias internacionales, pero lo que es muy probable es que el virus tenga un efecto en las finanzas y el intercambio comercial.
Los mercados han sido los primeros en proyectar el impacto de este tipo de influenza surgido en la ciudad de Wuham, China; y será cuestión de un par de semanas que se note en la actividad productiva, advierte José Luis de la Cruz Gallegos, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).
“El hecho de que se estén cerrando total o parcialmente operaciones en China que produce uno de cada cuatro dólares en el mundo, hace pensar que existe un riesgo de que el comercio internacional se detenga, sobre todo en materia de manufactura, pues lo que implica es que en EUA, Corea o Japón se empiece a sentirse la menor capacidad de producción sobre todo a fines de febrero”, afirma. Continuar leyendo […]