El Economista | Elizabeth Albarrán.
La pronta ratificación del nuevo Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) da un elemento de certidumbre y un mejor ambiente para las inversiones. El efecto que pueda tener sobre la economía mexicana no será inmediato. Incluso expertos ven complicado que el Producto Interno Bruto (PIB) logre 2% que contempla la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en el 2020.
“Creo que, en el corto plazo, el acuerdo comercial no tiene la capacidad de revertir la desaceleración que vive la economía en general, especialmente revertir la recesión que se vive en el sector industrial”, comentó José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).
Explicó que algunas inversiones, tanto del sector público como del privado, se mantendrán en espera hasta que el Congreso de Estados Unidos y el Parlamento de Canadá ratifiquen el acuerdo comercial. En México, el Senado de la República lo ratificó el pasado 12 de diciembre.
De la Cruz consideró que la ratificación por parte de Estados Unidos podría ser hasta inicios del próximo año, pues algunos senadores estadounidenses esperarán a que se tenga mayor claridad sobre el juicio político (impeachment) del presidente Donald Trump.
“Si bien hay una parte positiva del T-MEC en reducir la volatilidad y dar certidumbre a algunos sectores como el aluminio y la farmacéutica, en términos generales me parece que para el 2020 el impacto será positivo, pero marginal”, detalló. Continuar leyendo […]