El Heraldo de México | Fernando Franco.
El Producto Interno Bruto (PIB) per cápita o ingreso por habitante en México cayó 1.2 por ciento en términos reales durante el tercer trimestre del año, frente a igual periodo de 2018, derivado del estancamiento en el que se encuentra la economía nacional, según un análisis del Centro de Estudios de Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados (CEFP).
Se trata de la segunda caída anual consecutiva, pues durante el segundo trimestre arrojó una contracción de 1.89 por ciento.
Según el CEFP, el ingreso per cápita real fue de 11 mil 394.46 dólares de julio a septiembre, 1.20 por ciento menos de lo registrado en igual periodo del año anterior (11 mil 532.47 dólares).
En moneda nacional, el PIB por habitante fue de 145 mil 529.91 pesos en esos tres meses, mil 762 pesos menos que lo registrado en el tercer trimestre de 2018.
De acuerdo con el CEFP, la caída se dio pese a la menor inflación que se observó en los últimos meses y a que la población creció menos que hace un año (0.95 por ciento en julio-septiembre de 2019 vs 0.98 en igual lapso de 2018).
Durante el tercer trimestre de 2019, la economía mexicana creció apenas 0.01 por ciento, con lo cual en los primeros tres trimestres avanzó 0.0 por ciento.
“El menor ingreso de los mexicanos se debe a la caída en la economía, la cual está estancada por los bajos niveles de inversión”, comentó Héctor Magaña, coordinador de Análisis del Centro de Investigación en Economía y Negocios del Tec de Monterrey.
Habiendo experimentado una recesión técnica en el primer semestre, la economía mexicana está estancada y Fitch sólo espera una recuperación económica de 1 por ciento en 2020”, señaló la agencia financiera el pasado viernes en un análisis, en el cual ratificó la calificación soberana en “BBB”, con perspectiva “estable”.
El menor ingreso de los mexicanos se refleja en el dinamismo del consumo privado. En los primeros nueves meses del año, la demanda de las familias en el país creció 0.91 por ciento en promedio mensual, el menor incremento en 10 años, según el Inegi.
“El consumo privado ha disminuido, ante una menor creación de empleo en el sector formal, pero hay indicios de que esto está tocando fondo y mejorará en 2020”, destacó la calificadora Fitch.
Alejandro Saldaña, economista en jefe de Banco Ve por Más, destacó que , aún cuando la masa salarial crece, existe un ambiente de cautela entre los consumidores, debido a que temen, por ejemplo, perder su empleo.
El subíndice del Indicador de Confianza del Consumidor que evalúa cómo va a estar el empleo en el país durante los siguientes 12 meses sumó dos caídas mensuales en noviembre. De hecho, en los primeros 11 meses registró una caída mensual promedio de 0.5 puntos, cuando en igual periodo de 2018 avanzó 0.62 por ciento.
La situación económica por la que atraviesa el país genera incertidumbre y nerviosismo, que se refleja en menor consumo y bajo crecimiento”, comentó José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico.
