Reforma | Alejandra Mendoza
Monterrey.- Pese a que en Nuevo León ha sido dinámico en la generación de empleo, el 59.2 por ciento de su población ocupada, trabaja de manera informal y sin las prestaciones de ley.
El porcentaje anterior representa a un millón 378 mil 95 de personas que laboran en esas condiciones, al tercer trimestre de este año, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
El organismo muestra dos conceptos, uno es la informalidad laboral y otro el empleo en el sector informal; el primero se refiere a personas que trabajan en un negocio registrado, pero que no reciben la protección de seguridad social, mientras que el otro hace referencia a quienes laboran en una unidad, la cual no se constituye como empresa.
Así, el 36.1 por ciento de la población ocupada trabaja en la informalidad laboral, que representa a 869 mil 742 personas, y el 21.1 por ciento, en el sector informal, es decir, 508 mil 353 ciudadanos.
Según las cifras del Inegi, de los 2 millones 325 mil 81 personas ocupadas en total en el Estado, un millón 378 mil 95 (el 59.2 por ciento), lo hacen sin tener prestaciones.
A nivel nacional, el 56.7 por ciento de los ocupados trabajan en la informalidad laboral y el 27.5 por ciento en el sector informal, es decir, el 84.2 por ciento tampoco recibe las prestaciones de ley.
Al respecto José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic), explicó que las cifras anteriores muestran que el Estado tiene un reto importante en materia laboral.
“A pesar de que el Estado ha tenido un buen desempeño en materia de crecimiento económico en los últimos años, pues eso no necesariamente se refleja en una mejora en las condiciones del mercado laboral, y entonces eso plantea el desafío que se tiene para que el crecimiento se traduzca en mejores condiciones del trabajo y de acceso de buenos salarios y prestaciones sociales para los trabajadores”, dijo.
Indicó que las personas que no cuentan con las prestaciones de ley, tampoco contarán con pensiones.
“En el País en realidad lo que tenemos es un México informal, en términos laborales, y lo que representa es que la mayor parte de las fuentes de trabajo, que son micro negocios y pequeñas empresas, son informales.
“En el estricto sentido la mayor carencia se encuentra en micros y pequeños negocios, y mucho de esto, en el comercio al por menor”, apuntó.
Agregó que el desafío que tiene el País y, en particular Nuevo León, es el promover el crecimiento económico incluyente, lo que implica generar actividades productivas formales y eso es lo que puede garantizar el bienestar social, no nada más presente sino también futuro de la sociedad.
“El problema de la informalidad es que genera un círculo vicioso Los niños que nacen en esa situación después cuentan con bajos niveles de escolaridad, salvo casos extraordinarios, normalmente es un círculo vicioso de pobreza, en donde al final del día el acceso a la educación tampoco es el que debiera”, apuntó.
