TLCAN: Por primera vez tenemos algo que ganar

AltoNivel
Por: Jorge A. Monjarás | Publicado en: Alto Nivel.
 

La tarea que tienen enfrente Ildefonso Guajardo y su equipo negociador del TLCAN termina siendo crucial para el futuro del país y definirá la suerte final de este sexenio. No es que la operación haya sido menos grave hace un año, cuando el gobierno entrante de Estados Unidos se empeñó en forzar la revisión del tratado; sucede que, por primera vez, México está en posición de ganar algo, en lugar de no perder como hasta ahora.

Me explico.

No parece haber mucha conexión entre cada una de las ocurrencias de la Casa Blanca pero, al final, las medidas son congruentes con la plataforma proteccionista con que hizo campaña el hoy presidente Donald Trump. Está cumpliendo lo que propuso, y lo está haciendo en el mejor estilo populista: el anuncio de la imposición unilateral de aranceles de 25% al acero y de 10% el aluminio fue dado finalmente el jueves 8 de marzo, con todo y genuinos obreros siderúrgicos a un lado del presidente. El presidente millonario del brazo de los trabajadores. Qué lindo.

Lo importante para México, además de la obvia “exención” de que fue objeto junto con Canadá, es que la posibilidad de que el TLCAN siga existiendo parece mucho más factible que hace un par de semanas. Es más, acaso tendremos nuevo tratado en cerca de un mes, a tiempo para las elecciones en México y para un candidato priista muy necesitado de una buena noticia; la que sea.

La forma negativa de enfocar esto es que el gobierno estadounidense está usando las tarifas al acero y el aluminio como una más de las amenazas contra sus “socios”, en busca de mayores concesiones. Y claro que lo está haciendo.

Sin embargo, la forma positiva es que, queriéndolo o no, el gobierno de EU está poniendo la mesa para conservar al bloque de Norteamérica: uno más agresivo y cerrado ante el resto del mundo, pero en el que México tiene que seguir siendo parte.

Dentro de las propias negociaciones del TLCAN, es ya cosa aceptada que México terminará cediendo en las reglas de origen del sector automotriz. El truco, el hilado fino, estará en qué porcentaje de contenido regional se acepta contra qué porcentaje de contenido específico de Estados Unidos. Si bien el contenido regional norteamericano no es lo que más prefieren escuchar las armadoras, un incremento podría incluso estimular la instalación de más empresas de autopartes en el país, en perjuicio de las empresas de Europa y Asia, por supuesto.

Este ha sido siempre uno de los argumentos del doctor José Luis de la Cruz, del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), un crítico del TLCAN en lo general. Apunta, como uno de sus argumentos más importantes, que México perdió el impulso que le otorgaba el tratado hacia el 2000, cuando China comenzó a arrebatarle mercados y a buscar más importaciones indirectas hacia Estados Unidos a través de nuestro país y otros.

México se habría dejado arrebatar el mercado estadounidense, al abrir su mercado hacia otras regiones, permitiendo esta triangulación de mercancías o bienes intermedios. En ese sentido, el cierre de fronteras del bloque norteamericano, si bien ya no va con la idea del libre comercio total, si resulta, siendo pragmáticos, realistas y francamente convenencieros, favorable para México. Continuar leyendo […]

Se permite el uso, distribución y difusión del contenido publicado en IDIC.mx toda vez que se cite la fuente, se vincule al artículo en nuestro sitio web y se mantenga la intención del contenido. En caso de que no sea de autoría del IDIC A.C. se deberá consultar con el autor original.