Reforma | Silvia Garduño
México no puede llegar a negociar aranceles con el nuevo Gobierno de Estados Unidos, advirtió Arturo Oropeza, especialista del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
En entrevista con REFORMA, afirmó que el país debe entender que la naturaleza del problema con Washington no es comercial, sino política, pues para el Presidente Donald Trump ha sido rentable usar a México ante una población desinformada y afectada por la reestructuración del orden económico global.
Señaló que Trump no va a cambiar de estrategia, aunque tenga una salida comercial, pues su objetivo es político y, por lo tanto, México debería tener montada una estrategia política, no a un equipo con experiencia en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
«Sería un grave error llegar a revisar aranceles, pues es confundir la negociación del TLCAN con una negociación comercial, cuando lo que se requiere es una negociación de Estado. Hay un problema de Estado, no de comercio», subrayó.
Para el Doctor en Derecho, México no podría aceptar un arancel superior al 2.5 por ciento en automóviles, que es la tasa que tiene Estados Unidos con el mundo, pues sería romper la naturaleza del acuerdo y el país se vería obligado a salir.
«Podemos platicar de otras cosas, de propiedad intelectual, protección de inversiones, pero no me pidas que le rompa el corazón al tratado. Aceptar más del 2.5 (de arancel) es romperle el corazón al TLCAN», comentó.
Oropeza dijo que al país no le espanta Trump, sino su propia debilidad como país.
«Lo que nos da terror es que llegó el lobo y tenemos una casa de paja. Estamos aquí por culpa nuestra. Nuestra debilidad es el problema más importante que tenemos frente a la nueva realidad del cambio de gobierno en Estados Unidos», añadió.
TLCAN
Oropeza explicó que México hizo del TLCAN su modelo de desarrollo, instrumentando desde entonces una estrategia de libre mercado ortodoxo, que no ha logrado reducir la pobreza ni la informalidad.
Resumió que el país debe negociar teniendo en mente que Estados Unidos busca resultados políticos, no comerciales, y poniendo en la balanza la realidad del Tratado.
Es decir, que solo 50 empresas concentran la mitad de las exportaciones a Estados Unidos, que 40 por ciento del contenido de las exportaciones mexicanas son contenidos estadounidenses y entre 30 y 40 por ciento asiáticos.
«Tampoco tendríamos que sobrevalorar y esto para materia de negociación es importante», expresó.
Además, consideró, se debe tomar en cuenta que la integración de América del Norte es un sueño que nunca ha sido cierto, porque aunque la idea no carezca de lógica, Estados Unidos nunca lo ha querido.
Recordó que la violación al TLCAN no empezará con Trump, pues Estados Unidos mantiene subsidios al campo y ha tenido una participación importante en las empresas de su sector industrial, lo que México ha tolerado.
Consideró que México puede usar el tiempo a su favor en esta negociación, pues decisiones políticas como éstas no pueden sostenerse en el largo plazo, y por el desgaste de la presidencia de Trump.
«Hay que tener cuidado en la oferta que vayamos a hacer y aceptar. Si no entendemos la necesidad política del éxito de la negociación para Estados Unidos, podremos caer en el error de ofrecerles y aceptar situaciones denigrantes e insuficientes.
«Cualquier esquema de reimposición del TLCAN en contra de lo que marca la OMC sería un fracaso», dijo.
Intercambio dinámico
El intercambio comercial entre México y Estados Unidos sumó 495 mil 589 millones de dólares durante 2015.
EXPORTACIONES A EU (Millones de dólares)
| 2010 | 238,684 |
| 2012 | 287,842 |
| 2014 | 318,366 |
| 2015 | 308,788 |
IMPORTACIONES DE EU (Millones de dólares)
| 2010 | 145,007 |
| 2012 | 185,110 |
| 2014 | 195,278 |
| 2015 | 186,802 |
Fuente: Secretaría de Economía.
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