El mal desempeño de Estados Unidos se encuentra vinculado con la contracción de la inversión pública y privada en construcción
Por José Luis de la Cruz Gallegos*
Lo habíamos comentado en las semanas previas, la economía de Estados Unidos no tiene el comportamiento sólido que algunos análisis habían estimado. Durante el primer trimestre del año el PIB norteamericano solamente aumentó 0.2%, una cifra lejana del 3.1% con el que se elaboraron los Pre-Criterios de política económica.
El mal desempeño de Estados Unidos se encuentra vinculado con la contracción de la inversión pública y privada en construcción. De hecho en el caso del gasto público se contabilizan tres caídas mensuales consecutivas. La inversión en estructuras retrocedió 23% durante el primer trimestre del 2015.
El debilitamiento de la principal economía del mundo afecta al gasto personal de las familias, algo que ya afecta a las ventas al menudeo. Solamente el sector automotriz mantiene un ritmo de ventas positivo aunque el resultado de abril fue inferior a lo estimado por los analistas del sector.
Lamentablemente la evolución del sector externo tampoco es favorable, el déficit de 522 mil millones de dólares superó el registro promedio del último años y fue producto de la apreciación del dólar: las exportaciones de Estados Unidos retrocedieron 7.2% y sus importaciones se elevaron 1.8%.
Los resultados de las manufacturas tampoco generan un escenario optimista, para el mes de abril el índice ISM continúa en la fase de expansión pero sigue retrocediendo. La dinámica coincide con el ciclo industrial estimado para marzo: el sector sigue debilitándose.
En conjunto los resultados han propiciado que la Reserva Federal siga dilatando su decisión de aumentar la tasa de interés de referencia, sin embargo ello no evitó que las bolsas de valores cayeran como producto de los malos resultados del PIB norteamericano.
Sin lugar a dudas que esto nos representa una buena noticia para la economía mexicana, particularmente cuando las finanzas públicas continúan debilitándose. Para el mes de marzo el déficit público superó los 100 mil millones de pesos, ello a pesar de que se contabilizaron 31 mil millones adicionales por la transferencia extraordinaria del remanente del Banco de México.
Como resultado del mayor déficit, los requerimientos financieros del sector público alcanzaron el 43.9% del PIB, más de 7.6 billones de pesos. De acuerdo al reporte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público los requerimientos se incrementaron en 2.1 puntos porcentuales en los primeros tres meses del año.
El incremento de los requerimientos financieros se da en un entorno de bajo crecimiento económico, a pesar del mayor gasto público. Dado que Estados Unidos muestra una dinámica poco sólida México deberá optar por alternativas de política económica para reactivar su crecimiento. Sin lugar a dudas el fortalecimiento del mercado interno es el camino, pero basado en la producción propia, es decir en el fortalecimiento de la base productiva de bienes y servicios en México.
Para que ello ocurra se deberá ampliar el fomento a la inversión privada, incrementar la confianza de los empresarios y elevar el financiamiento de la banca de desarrollo a los sectores productivos estratégicos para el crecimiento de México.
En los meses por venir se deberá revertir el daño que el proteccionismo ha provocado a los productos de exportación mexicanos. De igual forma debe evitarse la afectación que la planta productiva nacional esta sufriendo de la competencia inequitativa en algunos sectores industriales.
El desarrollo del sector energético y de las zonas económicas especiales debe ser el inicio del camino, para ello es prioritario que se orienten los recursos de la banca de desarrollo a los sectores productivos que pueden elevar el contenido nacional de nuestra producción y exportación, así como su valor agregado. Al mismo tiempo debe orientarse el fomento a la pequeña y mediana empresa innovadora, la que puede insertarse en los procesos productivos más competitivos.
*Director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC)
