Distrito Federal, 10 feb (Reforma).- La participación del acero mexicano en el mundo poco a poco se diluye.
La sobrecapacidad productiva y las barreras comerciales de algunos países influyeron para que las exportaciones de productos siderúrgicos registrara una caída de 4 por ciento el año pasado, en comparación con 2013.
En 2014, los envíos al extranjero contabilizaron 5.79 millones de toneladas, mientras que las importaciones rebasaron los 12 millones, reportó la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero).
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Durante 2014, América Latina importó 8.3 millones de acero laminado desde China a un precio promedio de 658 dólares por tonelada, 6 por ciento menos respecto a los precios que ofrece China al resto del mundo, refirió la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero).
Los países que compraron acero chino más barato fueron los de Centroamérica, con un precio de 569 dólares por tonelada, y Perú con 601 dólares. En el caso de México se importó acero laminado chino a 696 dólares la tonelada.
«El fenómeno de precios a la baja en las exportaciones de laminados chinos es parte de la estrategia de mantener exportaciones crecientes para tener sus plantas operando a capacidad y evitar el desempleo», advirtió la Alacero, asociación que congrega a 50 empresas de 25 países.
En materia de comercio exterior, José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, agregó que la perspectiva para los fabricantes nacionales se está volviendo más conservadora dada la entrada de productos asiáticos.
«Es complicado que se empareje (el comercio internacional) sobretodo frente a los chinos, en donde, además de otras cosas, hay apoyos estatales, financiamientos, tipo de cambio, hay demasiados elementos», comentó.
Para el director, dadas las condiciones de consumo nacional e internacional, muchas acereras en México serán más prudentes en la ejecución de sus proyectos de negocio durante este año.
