Voz de la Industria Vol. 7 N° 149.
“Si no hay crecimiento económico no hay empleos y si no hay empleos no hay bienestar y si no hay bienestar no puede haber paz y tranquilidad” fue la aseveración que el presidente Andrés Manuel López Obrador realizó el pasado viernes 11 de abril en su conferencia de prensa matutina.
Con ello remató su reflexión sobre la consecuencia del bajo crecimiento promedio registrado durante las últimas décadas: 2%. La pregunta que subyace es ¿Quién se encargará en la presente administración de garantizar que se cumpla la directriz del presidente López Obrador? ¿Lo puede hacer sin mayor inversión privada nacional?
Sin lugar a duda que el primer mandatario tiene razón, el crecimiento económico debe ser el objetivo central para el gobierno mexicano, de otra manera no se podrá revertir la precarización social, laboral y productiva que se ha observado desde 1982, cuando la crisis y el estancamiento se volvió parte estructural de la historia económica del país. Coincidiendo en la relevancia que tiene el crecimiento para alcanzar bienestar, paz y tranquilidad, es momento de considerar cómo revertir la tendencia que sigue la economía en estos momentos.
El resultado publicado por el INEGI respecto a la actividad industrial fue contundente: el cuarto mes de caída consecutiva. Si este comportamiento se mantiene por dos meses más se podrá hablar de una recesión en la industria mexicana, algo que nadie desea y que se debe evitar. En febrero la industria retrocedió (-) 0.9% en comparación con el mismo mes del 2018. Con ello el promedio de los primeros tres meses de la actual administración es (-) 1.5%, el segundo más bajo desde 1995.
En este sentido es pertinente preguntarse qué dicen las cifras oficiales respecto al crecimiento de la industria mexicana […] continuar leyendo.
Documento
VozIndustria 20190416 Vol 07 Num 149 – Sin crecimiento no hay bienestar–
