El Financiero | Con información de Héctor Usla y Eleazar Rodríguez.
Como respuesta a los aranceles que Estados Unidos impuso contra el acero y aluminio mexicanos, México ordenó grávamenes, que ascienden a tres mil millones de dólares, a productos estadounidenses siderúrgicos, industriales y agroalimentarios, los cuales, importa principalmente de estados con gobiernos republicanos.
En el caso de las piernas y paletas de cerdo, gravados con 20 por ciento de aranceles, tres de los cinco estados del país vecino que más los exportan a México son republicanos.
“Hay un objetivo de buscar que esto tenga un costo político para Donald Trump, es lo que el gobierno ha intentado establecer, y es por eso que ha seleccionado (los productos), más que por criterios estrictamente económicos, para que esto tenga también una sociedad con efectos políticos al interior de Estados Unidos”, mencionó José Luis de la Cruz, presidente de la Comisión de Estudios Económicos de la Concamin y director del Instituto para el Desarrollo Industrial y Crecimiento Económico.
“En el caso del cerdo vemos unas caídas en Estados Unidos, porque también no tienen mucha salida los productores a otras partes del mundo, México es su principal mercado, México es el tercer importador de cerdo del mundo, y por cercanía les conviene vender a México, por eso las asociaciones de porcicultores de Estados Unidos apoyan el TLCAN, porque un mercado importante para sacar sus piernas y sus paletas es México”, mencionó al respecto Juan Carlos Anaya, director de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas. Continuar leyendo […]
