Forbes.- La filosofía nacionalista de Donald Trump, que se ve reflejada en la amenaza de imponer aranceles al acero y al aluminio, el Brexit en Gran Bretaña y la supremacía China podrían ser la primera señal de que el libre comercio ha llegado a su fin.
De acuerdo con el estudio La nueva era de la globalización: la batalla del acero y el aluminio, elaborado por el Instituto para el Desarrollo Industrial y Crecimiento Económico (IDIC), la lógica del libre comercio llegó a su fin, al menos bajo la modalidad que le dio vida durante la década de los años ochenta y noventa.
No es casualidad. China, Estados Unidos y Gran Bretaña buscan reorientar los flujos de inversión productiva.
Con la amenaza de implementar aranceles en el acero y el aluminio, Donald Trump busca implementar cambios que también definirán el rumbo de la economía mundial. El presidente norteamericano ha sido claro al decir que las guerras comerciales son buenas y fáciles de ganar.
“Representa la continuación de su creencia de que, para Hacer América Grande, Otra Vez, es necesario recuperar la producción, la inversión y el empleo en las manufacturas”, dice el documento del Idic. Continuar leyendo […]