Los límites al crecimiento del consumo privado

La Voz de la Industria | Vol. 04 N°64 | Descargar el reporte completo.

El crecimiento del consumo privado no será sostenible si no hay una reactivación de la producción interna, particularmente en el sector industrial. De acuerdo al INEGI, el crecimiento económico del primer trimestre del año fue solamente del 2.6%[1], una cifra modesta si se contrasta con la variación acumulada del Indicador Mensual del Consumo Privado en el Mercado Interior durante el primer bimestre del 2016: (4.3%).

Lo descrito refleja que el consumo privado supera ampliamente a la producción interna. Además, debe citarse que el componente del consumo privado que exhibe un incremento más vigoroso es del asociado con los bienes importados. Hasta febrero el crecimiento acumulado del consumo de los bienes provenientes del extranjero fue del 6.6%. Sin lugar a dudas, esto sintetiza que, a pesar de la depreciación del tipo de cambio, el mercado interno mexicano sigue privilegiando la adquisición de bienes importados, lo cual termina desplazando a la producción nacional.

En consecuencia, el crecimiento o el aumento en el consumo privado tiene una menor influencia por parte de los bienes y servicios nacionales. En el primer caso su variación acumulada fue del 3.7% y en el segundo del 4.4%. Si bien ambas cifras son positivas, es evidente que los mayores incrementos son atribuibles al consumo de bienes importados.

El comportamiento descrito del consumo es estructural. La gráfica 1 muestra que la mayor variación entre el 2013 y 2015 también fue atribuible al consumo de bienes importados.

Adicionalmente, se debe considerar que el entorno de mayor consumo, no necesariamente es consecuencia de un mejor escenario laboral y de ingresos, en Voz de la Industria N° 62, La precarización de los ingresos en México, el análisis presentado mostró la pérdida de empleos con mayores ingresos salariales y la mayor generación  en los rangos inferiores: la ocupación en México de personas que ganan más de 5 salarios mínimos se redujo en 2.2 millones con respecto al nivel que existía en 2008, antes de la última gran crisis económica. La creación de ocupación se ha centrado en el segmento de quienes ganan menos: 7.9 millones de mexicanos tienen un ingreso de cuando mucho llega a un salario mínimo, 2.5 millones adicionales al nivel existente en 2008.

De igual manera, si se comparan las remuneraciones como proporción de PIB en un plazo mayor, las mismas pasaron de significar …continuar leyendo|

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